Con su casi 30 % de desempleo, su casi un millón doscientos mil parados, ruina total y corrupción generalizada en la Junta de Andalucía, celebrar la Feria de Abril de Sevilla es una impresentable frivolidad para nuestra región.
Mientras una gran parte de los andaluces están sumidos en la desesperación total al tener todos o casi todos sus miembros en desempleo, mientras muchas parejas vuelven a casas de sus padres al no poder pagar la hipoteca, mientras las colas ante el INEM se hacen interminables y los comedores de Cáritas están a rebosar,…
…mientras ocurre todo eso, los pocos sevillanos privilegiados, esos que engrosan una mayoría de trabajadores enchufados en la Junta de Andalucía, que consolidaron un alto puesto sin haber opositado por el solo hecho de ser de la PSOE o esos empresarios corrompidos que fundaron empresas a la sombra del poder para conseguir contratos en la Junta u otra instituciones donde gobiernan los rufianes del puño y la rosa, comen beben, cantan, bailan y holgan mostrando lo bien que les va, ya sea en coche de caballos, o diciendo eso “te invito a mi caseta”.
Durante una semana los barrios aledaños al sarao, tienen que soportar el no poder desplazarse normalmente, los humos de las cocinas de las mugrientas jaimas, la contaminación acústica, los excrementos y el olor a una mezcla entre caca de caballo, orines humanos y “Zotal”, producto inventado en el pueblo cercano de Camas para combatir la mala costumbre de muchos sevillanos de hacer pis en la calle convirtiendo al barrio de los Remedios en un gigantesco retrete. Porque la mierda, montañas de mierda, es una de las características de este evento. Dicen que la Feria la fundaron un vasco y un catalán… que Satanás los tenga en su gloria.
La Feria es la exaltación de los peores valores de la gente de esta tierra: la falta de respeto a los demás, la prepotencia, el elogio de lo superficial, la falsa amistad, el rechazo a lo moderno, el clasismo, el aparentar lo que no se es o, peor aún, en presumir de lo que se es, etc.
Luego, a lo largo de la semana, nos visitarán extranjeros de medio mundo, madrileños llegados por oleadas en el AVE, carteristas de toda la UE, narcotraficantes distinguidos, putas de alto standing, políticos, canis, etc formando la versión siglo XXI del patio de Monipodio porque Sevilla no ha dejado de ser nunca la ciudad de los pícaros que estos se han sabido acomodar al devenir de los tiempos.
Esta noche del 2 al 3, de mayo miles de bombillas de alto consumo, iluminarán una Feria insostenible donde la gente beberá litros de alcohol en la huida hacia adelante.
Pasan los años y seguimos siendo la pandereta de España. No es mas qu lo que nos merecemos.
A ver si por lo menos este año no hay asesinatos.
Riá pitá, riá pitá, riá pitá,…
7 comentarios:
¡Arsa!
Para muchos el aparentar, la juerga contínua y el "comercio y el bebercio" es el motor que mueve sus vidas, sé de gente que se empeña hasta las cejas y se gasta lo que no tiene sólo pensando en eso...¿el "estar en el candelabro?"
No sé si eres valiente o temerario diciendo tales cosas, pero la sinceridad es patente.
Los que hemos vivido fuera de Andalucía, siendo de aquí, hemos desarrollado capacidad crítica además de tener que soportar estoicamente chanzas y burlas por ser Andaluces. En cambio si eres de Soria, por ejemplo, nadie te dice nada.
Y desde luego mirarse el ombligo no es una virtud precisamente.
Mira, no es consuelo, pero me estabas recordando a les Fogueres de Sant Joan. Jaimas malolientes y competencia, a ver quién saca las sedas más caras o da las comilonas más lujosas. Políticos con cargos de honor junto a borrachuzos, y eso ocupando toda la ciudad, porque los racos no son como en Valencia, están todos fuera colapsando la circulación de coches, ambulancias..
Una auténtica "Hoguera de las vanidades", como la que tan bién describes.
Hombre, generalizar te hace equivocarte al querer sentar cátedra. En todas las localidades hay fiestas donde ocurre esto, no es sólo en Sevilla (aunque evidentemente el Blog es sobre Sevilla). Conste que entiendo el mensaje, pero insisto en que generalizar en este caso te hace equivocarte y caer en lo mismo que mis clientes catalanes: "ah, es verdad, que ya estáis otra vez de fiestas..." a lo que les tengo que recordar "igual que vosotros el Lunes de Pascua" y todo zanjado.
Seamos críticos, pero en esta ocasión creo que eres algo injusto.
E insisto, entiendo el mensaje y no te falta razón en el fondo, pero creo que te confundes en la forma.
P.D.: la Feria me revienta y voy un par de días como excusa para tomarme unas copas con mis amigos, no más.
Bueno, gracias por dejarnos también la otra cara de la Feria, lo que tiene de negativo y barbárico.
Saludos blogueros
Discrepo contigo. Hay mucha gente que vive de la Feria. Preguntale a los miles de personas que trabajn en las casetas, que en una semana de trabajo (durísimo, eso sí) sacan un buen pellizco. Preguntales si quieren Feria. Y preguntales a los camareros y demás personal de hoteles de la ciudad si quieren que los hoteles estén hasta la bola.
En parte es verdad lo que dices, pero aunque algunos no lo sepan o no lo quieran saber, la Semana Santa y la Feria, además de fiestas locales, son ganancia para el ayuntamiento, para las empresas, y por tanto miles de trabajadores.
yo voy a la feria, me visto de flamenca y acudo a mi caseta xa bailar y comer con mis familiares y amigos, no veo malo eso, y también acudo al trabajo x las mañanas, es 1 semana donde se duerme poco pero se disfruta.
Hay muchísimas personas q salen adelante gracias a la feria, camareros, cantantes, los de los cacharritos, los puestos de chuches,taxistas, personas q trabajan de vigilantes en la puerta de una caseta, a todos esos les viene como agua de mayo la feria, y al ayuntamiento.
Pero si vienes de fuera de Sevilla capital y te das 1 paseo x las calles, sin tener caseta y sin conocer a nadie de verdad(los amigos y no los conocidos) acabas odiando esta fiesta.
X cierto soy 1 privilegiada q ha ido 3 dias a la feria y ni soy empresaria, ni política, sólo hay q saber pedir croquetas en vez de jamon
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