50 + 47 + 12
= 109 diputados andaluces
Este viernes
6 de septiembre se ha votado la elección de la nueva presidenta de la Comunidad
Autónoma andaluza.
La elegida después
de unas primaria amañadas en su partido, y de no ser votada candidata por los ciudadanos,
algo que es inmoral pero sí legal, ha sido elegida al votarle los diputados del
PSOE (47) , los de IU (12) mientras que los del PP (50) votaron en contra.
Una serie de
reflexiones nos lleva este evento:
·
Que
un a candidata de perfil bajísimo, proveniente de un partido corrupto sea la actual
presidenta de la mayor Comunidad Autónoma española.
·
Que
el partido que ganó las elecciones en maro de 2012 y posee la mayoría relativa
en la cámara, el PP, no haya presentado candidato como era su obligación aún a
sabiendas que iba a perder la votación.
·
Que
los diputados voten cual borregos lo que le dicen sus partidos so pena de
perder un lugar en la lista electoral próxima. Indignos ¿reprentantes? del pueblo
andaluz. Cuesta trabajo pensar que los 47 diputados socialistas y los 12
comunistas estuviesen de acuerdo para votar a una inepta, apadrinada por el
corrupto Griñán.
·
Por
último que no hay nadie entre estos políticos que se plantee el cambiar las
estructuras partitocráticas de esta España decadente y enmierdada hasta el
cuello y proponga un cambio en la ley electoral.
Con esos
lodos nauseabundos llegan estos polvos en forma de perder unos juegos
olímpicos donde nos representan una monarquía corrupta, un presidente del gobierno
corrupto y una alcaldesa que lo es por el análogo sistema al que han elegido a Susana Díaz.
En España se
compra y se venden cargos a cambio de dignidad o vergüenza.