Tradicionalmente en los consejos de administración de las
Cajas de Ahorro se han sentado, entre otros, representantes sindicales y de los
partidos políticos. Aunque esto se entendía como un trabajo, la realidad es que
era un premio que otorgaban los cuadros dirigentes de las organizaciones citadas.
Es por ello que muchas de estas personas carecían de formación económica para
ocupar esos puestos pero no importaba. El asunto era cobrar un sobresueldo, a
veces muy cuantioso y decir amén a lo que mandasen sus mayores. Esto lo hemos denunciado mas de una vez en este blog.
Ese “amén” ha supuesto conceder préstamos suicidas a
empresas o instituciones que no los han devuelto con el consiguiente agujero en
las entidades financieras. Lo curioso del caso es que ahora nos toca a todos
los españoles pagar ese desaguisado en forma de impuestos. Unos los podremos
pagar apretándonos el cinturón y otros viviremos en precario. Mientras tanto
esos políticos y representantes sindicales, llevan Rólex en la muñeca, se van
de crucero o viven en lujosas urbanizaciones. Quien más y quien menos conoce
los nombres de los de su provincia.
Porque cuando Rajoy, dice que nacionalizar Bankia quiere decir
que los asalariados vamos a pagar las deudas de esa entidad y desde luego ni PP
ni PSOE quieren investigación en el Congreso.
Ya hay quien ha denunciado por prevaricación al gobernador
del Banco de España. Creo que la
denuncia debería extenderse a todos esos representantes políticos y sindicales
que han hecho dejación de sus funciones nombrando o como representantes en las
cajas. Y luego que se embarguen el patrimonio de bancos y sindicatos. Si hiciese
falta más dinero embárguense las cuentas corrientes de los dirigentes políticos
que han nombrado a esos elementos, incluido Rajoy y Rubalcaba.
La “pseudonacionalización” de Bankia supone ya el final de
esta etapa democrática, una puñalada trapera a la honradez y un atraco a los
ciudadanos. Yo ya no creo en este estado ni en sus dirigentes. Me siento
ninguneado y robado y no es cuestión de matices políticos sino de que no hay
honradez entre nuestros dirigentes. Que esto es cada día más Argentina y
Grecia.
1 comentario:
A veces me siento como cuando unos ladrones entraron en nuestra casa y nos robaron. Durante mucho tiempo al echar de menos mis cosas robadas,inconscientemente regirtraba el lugar donde las tenía con la vaga ilusión de encontrarlas en su sitio. ¡Más nada!
Pes eso mismo me ocurre ahora, a menudo,aunque sea en fin de semana, visito nuestra pequeña empresa con la vaga ilusión de encontrar como antaño alguna llamada en el contestador, algún mensaje, correo...
Creo que aún no he asimilado que estas castas de chorizos nos lo ha robado todo, que ya no hay nada y no va a aparecer.
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