domingo, 14 de febrero de 2010

¿Andalucía comunidad bananera?



Es bien sabido que mucha gente separa la culpabilidad penal de la política, algo razonable, y por eso vamos a hablar aquí de un caso en el que, en su momento, corresponderá a los jueces emitir una sentencia que absuelva o condene. Pero nosotros paralelamente podemos valorar unos hechos y ver si son éticamente aceptables o no. Nos referimos a las actuaciones de Paula Chaves, hija del anterior Presidente de la Junta de Andalucía y actual vicepresidente tercero del gobierno, Manuel Chaves.
Esta señora, con muy poca experiencia profesional, sorpresivamente ha actuado ligada a una serie de empresas como Minas de Agua Teñidas o varias del Grupo Abengoa y ha conseguido subvenciones millonarias para las mismas. Evidentemente nadie se cree en las habilidades de esta señora que no ser la de “hija de”. Y desde luego si hubiera procurado como la mujer del juez, ser honrada y parecerlo, jamás hubiera aceptado un trabajo que podía alentar la sospecha de favoritismo de su padre. Un padre que consiguío el record de paro cuando estuvo de ministro de trabajo y que ocupaba ya cargos relevantes en el partido cuando ocurrieron siniestros sucesos en la política española. Alguien que se ha demostrado capaz de ganar muchas elecciones en Andalucía y perder todos los retos en cuanto a progreso en la misma. Un personaje que se ríe de Hacienda y del ciudadano declarando un ridículo patrimonio a pesar de que lleva toda la vida viviendo del erario público. En definitiva un individuo de los más siniestros y negativos de la política española desde que llegó la democracia.
Entramos en un terreno de inmoralidad manifiesta donde el dinero se da por amiguismo y/o a los poderosos demostrando que si está alejado de las fuentes del poder poco se podrá conseguir de nuestra Administración Autonómica,
El hecho es mucho más grave que la simple subvención a unas empresas lo merezcan o no. Porque lo que está haciendo la Junta de Andalucía, con su política sectaria es que las subvenciones no lleguen a las empresas que mas rentabilidad podrían sacar de aquellas sino a la de sus amigos. En definitiva, se está eliminando la libre competencia, sustituyéndola por un despotismo y con ello se está impidiendo que las empresas mejores creen riqueza. De esta forma nunca habrá proogreso.
A la postre el dinero que se cede injustamente servirá para llenar el bolsillo de unos cuantos aprovechados y los empresarios con empuje, las miles de Pymes andaluzas con ganas de situarse en el mercado o bien cerrarán o se irán a otra región. El PSOE-A pues colabora para que en Andalucía nunca se cree un tejido empresarial que nos haga una región fuerte.

Mientras todo esto ha ocurrido, el PP del señor Arenas prácticamente no la echado en cara a Chaves su falta de vergüenza y no me vale que haya puesto alguna denuncia a sabiendas que el sujeto en cuestión va a salir inmune. Que me expliquen a mi porque no lo ha hecho.

Pero desde luego no se debería tapar una Filesa con un Gürtel o viceversa.


1 comentario:

Natalia Pastor dijo...

Andalucia, (o "Andazulia" que diría el bueno de Manolo...) hace tiempo que se convirtió en un virreinato donde campea la más absoluta impunidad.
Treinta años de régimen dan para mucho, y entre otras cosas, a que la telaraña andaluza cada día sea más espesa e inexpugnable.