Ayuntamiento de Tomares: Pedimos Las cuentas claras

  



A un político no le basta con ser honrado sino también parecerlo. Y sobre todo cuando es acusado de algún asunto que roza la corrupción ya tenga o no consecuencias penales.

Digo esto porque al PP lo han pillado en el caso Bárcenas y a lo único que se dedica es a cerrar la boca ( “ no estamos para dimesss y diretessss”) por orden de Mariano Rajoy.

Hay muchos tipos de corrupción y no solo la delictiva de la que no nos vamos a extender aquí porque todo el mundo sabe de qué se trata. Nos referimos a la otra que supone el abuso del cargo para ordenar coas absolutamente inmorales  como por ejemplo enchufar a amigos y familiares con la excusa de cargos de confianza cuando el trabajo lo podría haber hecho un funcionario como el cado de los distritos denunciado aquí en entradas anteriores.

Y otro caso de inmoralidad es el abuso en gastos de representación como muy recientemente ha salido en prensa relativo al secretario general de UGT de Andalucía una especie de Carpanta sindical.

En Tomares hay un alcalde que e a su vez secretario general del PP Andaluz y teniente de alcalde, Eloy Carmona, que es Secretario General del PP de Sevilla, al que algunos militantes de su partido le han pedido que aclare ciertas cuentas del Ayuntamiento a lo que él contesta con el silencio o con algún burofax intimidatorio diciendo que cumple según la ley tal  o cual.

Porque una factura del Partido Popular ha sido cargada al Ayuntamiento de Tomares y los grupos de la oposición lo han denunciado ante los Tribunales:

 

 

No es ético escudarse en un error para justificar una actuación indebida o la ley para ocultar las cuentas de una administración. Si como en el blog de don Faustino Rodríguez Ortega, ex teniente de alcalde de Tomares por el PP,   se les acusa de excesivos gastos en comidas y otros asuntos lo que tienen que hacer los susodichos es mostrarlas y zanjar el asunto. Porque si no lo hace sobre le cae la sospecha de mal uso de caudales públicos sea algo ilegal o legal. Pero desde luego, sea lo que sea, bastante sueldo tienen los dos citados como para pagar las comidas de su bolsillo y no cargarlas al erario público. entendamos pues que lo que podría ser legal y por lo tanto no punible podría ser  inmoral.

En los EE.UU. los funcionarios públicos (civil servants) hacen un juramento de no recibir de proveedores ni invitar a ellos. Solo pueden hacer o recibir gastos menores como un par de cervezas por ejemplo. Yo, que si he trabajado con ellos y que jamás he vivido de la política lo he visto muchas veces. Aquí en cambio algunos cargan al erario público copiosas comidas.

El tema se agrava cuando vemos a los ayuntamientos con dificultades económicas y uno se pregunta… ¿por qué el ayuntamiento tiene que pagar comidas?

Que me conteste Eloy Carmona, en este blog o por burofax, como prefiera.